viernes, 13 de febrero de 2009


Y tus manos no me escuchan,
y mis labios no quieren ni verte.
Un minuto antes de dejar de quererte.
Y mi olvido no te olvida,
y mis miedos te desean suerte.
Un minuto antes de dejar de quererte.

Y siento que me llenan la cara de dedos,
la penumbra del deseo y las ampollas de este adiós.



No hay comentarios:

Publicar un comentario